Versos Aerdna

Estudiante: Julieth Andrea Rincón Vargas

Trabajo Creativo: Versos Aerdna

Técnica: Poesía

Inspirado en el movimiento feminismo, sexo y género de la edad medieval siendo una complejidad critica en que la actualidad se sigue presentando, feraz mente invadiendo provocando y vulnerando a las mujeres, siendo una lucha continua de saberes educativos y comunicativos, en pie de lucha ante la suprimida y la justicia de derechos obsoletos en los que en la realidad se perciben.

Versos Aerdna

En la noche vibraba con el despertar de las tinieblas,

la oscuridad invadía la calma de mis despertar,

no sabía analizar no sabía pensar,

sabía lo que hacía más no lo que se predecía,

moría en silencio en los más profundos de la agonía,

agobiado me sentía sin mi amada mía,

luz de brillos del azul del cielo era una casa vieja en la a lejanía,

son susto le tenía me acerque a saber que percibía entre mares de llanto una mujer se presentía,

era una conocida, su marida la pretendía,

entre ellos la manipulaba y la obligaba hacer su sumisa,

no sabía que quería,

matarla quizás creía,

entre risas el hombre la poseía decía que la amaba y que sus hijos ella tendría,

lo que no entendía yo era por qué agobiada se veía,

el patriarcado la vulneraba y la hacía reprendida,

en sus laureles y mares se encontraba vacía,

más no era amada solo hijos ella tendría,

el hombre la golpeaba más ni voz ni voto ella tendría.

en un capullo con vista al sol se encontraba cristina,

sin pensarlo se reveló de lo que más temía,

no se dejó vencer y lucho por lo que más quería,

el sistema no la opresaría,

en marcha de rebelión ella escribió para aquellas que no se sentían,

literaria y polémica francesa se llevó el impacto del movimiento de libertad que se sostenía,

porque no cabe duda de que la opresión del hombre solo es un acto de cobardía,

Cristina recompensa y esfuerza ante todas las mujeres,

dándonos a entender que la educación es el único límite de la obstrucción,

la moralidad absurda de que acompleja,

los llantos amargos de un querer desear desesperadamente sin ni siquiera amar en realidad.

No decaigas, no vulneres, tolera y en contras la armonía de los días grises.